Re: ALGO MAS SOBRE INTEGRACION

Marta Sananes (sananes@faces.ula.ve)
Mon, 25 Jan 1999 20:53:27 -0400 (GMT-0400)

Estimado Dr. Fuenmayor,

Intercalo mis comentarios a su segundo correo. (MS)

Me tomo la libertad de "terciar" en el diálogo entre Ud. y la profesora Lorna Haynes acerca de posibles integraciones de los países latinoamericanos movido por el interés y la actualidad del tema tratado. Que ese interés me sirva de disculpa.

MS: Por mi no hay problema.

Pronunciar un juicio acerca de decadencia de un país no puede ser cuestión de ciencia. Más bien, se manejan --en el mejor de los casos--criterios éticos o filosóficos (no científicos) en esta clase de apreciaciones. La decadencia tiene muchos ángulos y enfoques muy variados.

MS:

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Por otra parte, la "integración" no garantiza a un país ninguna cualidad del carácter de la decadencia o de la ascendencia. Véase, para el caso, lo que está ocurriendo en la anterior e integrada Yugoeslavia o en la ex-Unión Soviética. Además, sin negar la pujanza tecno-científica de los EE.UU. y su riqueza cultural, no comparto su idea de que lo mejor del mundo en materia de filosofía, arte o espiritualidad se esté generando en los EE.UU.. Habría mucho que discutir al respecto.

MS:

Tampoco eso de que "el naturalismo", y la "futurología" deban incluirse en "lo mejor del mundo".

MS:

Es cuestión de hecho, no de opinión, que en Venezuela se ha prendido una "llama de esperanza". Una vasta mayoría de la población venezolana --tal como lo demuestra el resultado de las elecciones-- tiene (por primera vez en 40 años) una esperanza de redención. El problema radica en si esas esperanzas puedan verse cumplidas. Esto es harina de otro costal: el futuro es incierto y no creo que hasta ahora haya elementos de juicio suficientes para formular juicios sobre este asunto. No hay duda, por otra parte, de que las dificultades son inmensas, los obstáculos considerables y las fuerzas que se oponen a cualquier cambio que favorezca a la sociedad en su conjunto son muy poderosas. Sin embargo, como dice el refran chino, un camino de mil leguas comienza con el primer paso.

MS:

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La ideologìa neoliberal dominante ha tenido un éxito considerable al infiltrar en las mentes la noción de que existen fuerzas misteriosas, ajenas a la acción de los seres humanos, que determinan la dirección y naturaleza del acontecer. Tal sucede con "EL MERCADO", "LAS LEYES DEL MERCADO"

MS:

y, ahora también, con LA GLOBALIZACION. La globalización es un invento de los países industrializados que resulta muy útil para sus propósitos, pero no para el de los países pobres.

MS:

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Otro aspecto al que Ud. se refiere es el de la causa de la prosperidad de los EE.UU.- Ud. la atribuye a la integración de sus
diferentes regiones, a la constitución de un gran estado federal con producción variada y amplio intercambio de productos. Evidentemente que no puede negarse que ese es, entre muchos, un factor de la prosperidad material de los EE.UU. Sin embargo, no es sino uno entre los muchos que se conjugan para producir un resultado como el ya anotado. Ud. no menciona
otros factores de mucho mayor evergadura, v.g., el hecho de que ese país casi no sufrió las consecuencias de las dos guerras mundiales, hecho que les permitió convertir sus industrias de guerra en industrias de paz y anegar con sus productos los mercados mundiales; la circunstancia de que se extendieron por el mundo en una avanzada imperialista sin rival de la cual
continúan beneficiándose, y que han impuesto sus reglas y dictámenes, casi sin traba alguna después del desmoronamiento del imperio soviético, en el planeta entero.

MS:

Más adelante habla Ud. de que nosotros, los latinoamericanos, tenemos, en contra de cualquier intento de integración, nuestro "espíritu hispánico mantuano y discordioso." Creo que éste es otro de los tantos mitos "made in USA" para señalar a los latinamericanos con una especie de signo fatídico que permite que la culpa de su "subdesarrollo" recaiga sobre ellos mismos.

MS:

Lo más importante, sin embargo, no es este tópico sino el de la integración posible. En realidad, los latinoamericanos estamos ya "INTEGRADOS" a los EE.UU. (a los EE.UU., principalmente; en términos secundarios a otros países industrializados). Sólo que esta integración se define y se lleva a cabo según los términos que los EE.UU. dictan y según el modo que a ellos
beneficia. Estamos ya "INTEGRADOS" para perjuicio nuestro y para provecho del gran país del Norte. Y si hablamos de otro tipo de "integración", veamos nada más lo que le pasó a México, "integrado" a los EE.UU. y Canadá. El desastre fue mayúsculo y no da señas de recuperación. Fijémonos lo que está ocurriendo en Brasil con las "integraciones" que los EE.UU. o sus policías internacionales (FMI, BM) imponen.

MS:

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Ciertamente, los vínculos más fuertes, económica y culturalmente, los tenemos con los EE.UU., pero esos vínculos no son de pares que se entienden, sino vínculos de dependencia, de sojuzgamiento. Un mundo en paz no puede existir en un sistema donde unos exprimen a los otros; donde el poder se reparte en forma desigual para desventaja de unos y ventaja de otros; donde la abundancia excesiva de unos pocos contrasta con la pobreza extrema de otros muchos. Las "integraciones", en este caso, son perjudiciales y engendradoras de inequidad e injusticia. Lo que nos "aleja ... de USA" no son los prejuicios y odios heredados de España; lo que nos aleja es la relación desigual de dominio, fuente de servidumbre y de opresión. Son los EE.UU. quienes impiden una auténtica integración, porque, de darse ella como tal, atentaría contra sus enormes privilegios.

MS:

España "se desprende" de los supuestos prejuicios en virtud de que tiene un gobierno conservador que se asocia al poder mundial para la explotación del resto del mundo.

MS:

No creo que yo tampoco pueda convercerla a Ud. de la bondad de mis argumentos, pero, como Ud. afirmó antes, siempre es interesante el intercambio de ideas. Una vez más, ruégole excusarme por mi intervención.
ABDEL M. FUENMAYOR P.

MS:

Marta Sananes