imaginado
el mundo espiritual
Marta Sananes
Nada
te turbe
Santa
Teresa de
Jesús
Nada
te turbe,
Nada te espante,
Todo se pasa,
Dios no se muda,
La paciencia
Todo lo alcanza;
Quien a Dios tiene
Nada le falta:
Sólo Dios basta.
Eleva el pensamiento,
al cielo sube,
por nada te acongojes,
Nada te turbe.
A Jesucristo sigue
con pecho grande,
y, venga lo que venga,
Nada te espante.
¿Ves la gloria del mundo?
Es gloria vana;
nada tiene de estable,
Todo se pasa.
Aspira a lo celeste,
que siempre dura;
fiel y rico en promesas,
Dios no se muda.
Ámala cual merece
Bondad inmensa;
pero no hay amor fino
Sin la paciencia.
Confianza y fe viva
mantenga el alma,
que quien cree y espera
Todo lo alcanza.
Del infierno acosado
aunque se viere,
burlará sus furores
Quien a Dios tiene.
Vénganle desamparos,
cruces, desgracias;
siendo Dios su tesoro,
Nada le falta.
Id, pues, bienes del mundo;
id, dichas vanas,
aunque todo lo pierda,
Sólo Dios
basta.
|
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La imaginación es una loca, la loca de la casa
Santa Teresa
de
Jesús
En los momentos de crisis, sólo la
imaginación es más importante que el conocimiento
Albert
Einstein
En el punto donde se detiene la ciencia, empieza la
imaginación
Jules de Gaultier
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No podemos dejar
de ser
En
un momento de perturbación me vino la idea de que simplemente somos
porque no podemos dejar de ser. Idea presumiblemente
surgida desde el inconsciente
espiritual
-el
otro inconsciente, según Viktor Frankl [1]- para entender que podamos
vivir
despreocupadamente sabiendo que hemos de morir de alguna manera y de
que
alegremente deseemos tener hijos.
¿Qué
es lo que no puede dejar de ser?
En
pensamiento espiritualista lo que no puede dejar de ser es el espíritu,
ser inmaterial de existencia eterna. Para el pensamiento materialista
la energía es lo que no puede
dejar de ser,
la magnitud física que se conserva en todos los
procesos. En una especie de pensamiento unitario podrían
ser de la misma naturaleza, imaginando el espíritu como forma
absoluta de energía.
Lo
que no puede dejar de ser
El
alma sería el ser de origen espiritual que nos hace
conscientes, nuestro yo más íntimo, que puede en estado
libre recuperar plena naturaleza espiritual. El espíritu es lo
que no puede dejar de ser.
La idea de existencia del espíritu es base del pensamiento
religioso [2]; también puede serlo del
apego a la vida y de la
aceptación de la muerte.
Me gusta imaginar
que
somos porque no podemos dejar de ser y de que, siendo tan asombrosa la
realidad del mundo en que vivimos, bien pudieran existir otras formas
de realidad aún más asombrosas.
Todos seríamos en esencia seres eternos, tanto los que amamos
como los que detestamos, conocidos o desconocidos, amigos o
enemigos, víctimas o victimarios…
Todos seríamos almas alternando nuestra existencia entre dos
mundos mientras logramos recuperar la naturaleza espiritual: este mundo
real y un otro mundo alterno que sólo podemos imaginar.
Sueño
del alma
Me
gusta la idea de que el alma en el mundo alterno sueña, que su
estado
natural es
soñar. Algo así ha imaginado Richard Matheson en su
novela llevada al cine como "Más allá de los
sueños [What dreams may come]"
[3]. Algunas creencias religisas
hablan de "el sueño del alma" [4].
El alma sería el estado del ser espiritual mientras
transcurre viviendo en el mundo real o soñando en el mundo
alterno. En la vida y en el sueño manifestando la memoria de sus
experiencias.
En el mundo real la existencia del alma transcurriría en un
cuerpo cambiante que además de alimento y hogar necesita conocer
el mundo, adaptarse, entenderlo y modificarlo, relacionarse con los
demás, amar y ser amado, producir, descubrir, crear, inventar,
reproducirse. También, cada día, necesita dormir.
El cuerpo durmiente necesita además soñar, sin que hasta
ahora se sepa bien por qué. Los sueños son experiencias
tan comunes y sin embargo tan extrañas al sentido del espacio y
del tiempo de la vida ordinaria, que sugieren imaginar que en el mundo
alterno la existencia pudiera transcurrir en un estado similar, un
estado continuado de ensueño [5] que,
como sabemos por nuestros
sueños ordinarios, pudieran ser tanto sueños
intrascendentes como ensueños maravillosos o también
pudieran ser pesadillas.
Los sueños del durmiente en el mundo real serían
pasajeras visitas del alma al mundo alterno.
El alma podría soñar -como en general ocurre en los
sueños ordinarios- sin estar plenamente consciente y sin que
pueda controlar el guión del desarrollo del sueño: como
una obra de teatro en la que actúa o de la que es
espectador.
También como en los sueños ordinarios, el contenido de
los sueños del alma libre estaría relacionado con las
experiencias de la vida y el estado de ánimo final, según
hubiera sido en paz o atormentado.
Imaginar
la naturaleza del mundo espiritual
Una vez imaginé una naturaleza del mundo espiritual [6]:
Se supone la existencia del Mundo de la
Luz: un mundo paralelo constituido a nivel elemental por
taquiones, partículas superluminales cuya velocidad está
limitada inferiormente por la velocidad de la luz. Se
supone también que el Mundo de la Luz es el mundo al que
se asoman los místicos y los profetas, el mundo
de las visiones religiosas, el Reino de los Cielos.
Siguiendo
con esa imaginación, el Mundo de la Luz sería la otra
realidad extraordinaria, el reino de Dios. Los espíritus, como
los supuestos taquiones [7],
serían de naturaleza
superluminal, capaces de actuar e interactuar voluntariamente sin
limitaciones de espacio ni de tiempo, conformando el ser de Dios:
Unidad e Infinitud simultánea.
Dios de infinita energía espiritual, de naturaleza
superluminal –más rápida que la luz – conteniendo toda
capacidad posible de consciencia: pensamiento, memoria, sueño,
imaginación.
Dios habría generado el gran estallido –Big-Bang- que
creó el Universo, sin consumirse en el acto sino
permaneciendo en su naturaleza espiritual infinita.
Con el gran estallido parte de Dios habría generado dos clases
de sustancias en dos submundos compenetrados: la sustancia
luminal –de la misma
naturaleza que la luz- y la
sustancia infraluminal que forma el
submundo material.
Para la sustancia infraluminal vale como ley que nada material puede
moverse más rápido que la luz.
Para la superluminal vale la ley opuesta, nada espiritual puede moverse
menos rápido que la velocidad de la luz [8].
Las almas serían
entes en un
estado fronteriza entre el
mundo superluminal y el submundo luminal, permaneciendo justo sobre el
límite
de la velocidad de la luz- inconscientes de su naturaleza espiritual
original pero aún suficientemente conscientes para desenvolverse
en el mundo
material.
Deepak Chopra en su libro Conocer a
Dios [9]
presenta una visión
semejante. Los submundos que aquí imagino corresponderían
con la visión de Chopra así:
Sustancia
superluminal |
=
|
Dios
= Campo virtual |
Sustancia
luminal |
=
|
Campo
cuántico |
Sustancia
infraluminal |
=
|
Realidad
material |
Las sustancias habrían evolucionado en paralelo, con la vida
surgiendo y evolucionando en el submundo material animada por la
acción de la evolución de las almas del submundo
espiritual luminal.
El alma podría lograr recuperar suficiente ligereza como para
despertar del estado de inconsciencia espiritual y retomar su
original naturaleza espiritual –su superluminosidad-
integrándose de nuevo en el ser de Dios.
Así,
Dios sería comunidad de espíritus conscientes,
santos, sabios, en la otra realidad extraordinaria. A la
vez uno e infinito, generando múltiples corrientes de
pensamientos, de sueños, de imaginación, guardando
infinitas memorias, sin limitaciones de tiempo ni espacio.
Jacopo
ROBUSTI, dit TINTORET - Venise, 1518 - Venise, 1594
Le Couronnement de la Vierge, dit Le Paradis Vers 1580 ©
Musée du Louvre/A. Dequier - M. Bard
En esta imaginación, todos habríamos sido parte de Dios y
todos podríamos volver a serlo. Todos podríamos
conectarnos con los espíritus en Dios para pedir y recibir
inspiración.
regreso
del alma
Imaginemos
que cada alma tiene como característica una
resistencia o pesadez espiritual, siendo tanto más pesada cuanto
más cargada de sentimientos odiosos y de experiencias
destructivas. Tanto más ligera cuanto más cercana a
sentimientos amorosos y experiencias constructivas. El alma muy ligera
disfrutaría ensueños deliciosos, el alma muy pesada
sufriría pesadillas.
El alma muy ligera pudiera despertar de su sueño transformada en
espíritu pleno a la otra realidad espiritual extraordinaria,
como si la ligereza espiritual le impulsara a acelerarse y ascender.
Redención
y resurrección
Dejándome llevar por la inspiración cristiana [10]
–que supone una sola oportunidad de vida real para las almas con
el premio final de la resurrección- imagino que el alma pesada
pudiera soñar indefinidamente siendo su ensoñar un
proceso de depuración que le permitiera aligerar su pesadez
hasta poder lograr despertar en plenitud como espíritu.
Si el alma viviera una sola vez en el mundo real, pudiera en
el estado de sueño del alma tener experiencias que se
corresponderían con las creencias cristianas de estadías
en el infierno y purgatorio.
Experimentaría así un proceso de redención que
transcurriría en el mundo alterno y que culminaría con el
logro del estado de ligereza que le permitiría al alma despertar
o resucitar a la realidad
extraordinaria de Dios.
La idea “un alma – una vida” satisface el deseo de
conservación de la identidad y del reencuentro en la realidad
espiritual con los espíritus que como almas animaron
a los seres
amados en el mundo real.
Sueños
y experimentación
Dejándome llevar por la inspiración Hindú [11] –que
supone que el alma puede reencarnar viviendo sucesivas vidas
reales- imagino que el alma muy lenta y pesada pudiera despertar
de nuevo en la vida real como si la pesadez espiritual le indujera a
frenarse y caer.
Tanto el “sueño del alma” como las experiencias de vida
serían episodios de un proceso de alivio hasta que finalmente el
alma, rápida y ligera de peso espiritual, despertara [12] a la
otra realidad extraordinaria como espíritu.
Así la evolución espiritual discurriría alternando
entre sueños y experimentaciones: episodios de sueño en
el mundo alterno y episodios de vida en el mundo real. Las vidas
pasadas no se recordarían porque tal como ocurre generalmente
con los sueños, todo se olvidaría al despertar a la nueva
vida real.
La iluminación sería el despertar al espíritu en
vida real de almas excepcionales. También, según
tradiciones hinduistas y budistas, almas excepcionales retornan a la
vida no por alivio sino por voluntad de ayudar o servir a otros.
La idea “un alma – varias vidas” parece más
compatible con una lógica de justicia y de
evolución.
Evolución
espiritual y material
El mundo material y el mundo espiritual evolucionarían en
paralelo [13], siendo las
almas soñadoras los agentes de
la evolución, evolucionando ellas mismas mientras hacen
evolucionar al mundo material. Tempranamente podrían intervenir
a escalas elementales interactuando con la sustancia material. Como
almas experimentadas en seres humanos podrían intervenir con
proyectos y acciones de vida. Las almas que ensueñan
esperarían realizar sus sueños pero también
podrían ver realizadas sus pesadillas.
En la realidad extraordinaria de Dios los espíritus
vivirían soñando despiertos, conscientes,
armoniosamente. Serían como miembros de un grupo musical en el
que todos son compositores y ejecutantes virtuosos, o en otra
metáfora, como superordenadores entrelazados en una superred en
la que se crean y se comparten al unísono pensamientos,
memorias, ideas, sueños, imaginaciones...
Las armoniosas creaciones espirituales inspirarían los
sueños de las almas y serían captados con diversos modos
de fidelidad según la disposición de las almas
soñadoras para sintonizar la inspiración. Así
pudiera el reino de Dios guiar la evolución de las almas y la
evolución del mundo material. Las almas en situación
de pesadez pudieran tener poca o ninguna sintonía y
pudieran tergiversar las líneas de inspiración.
Finalmente el alma experimentada, sabia y santa, culminaría su
viaje de retorno al espíritu, sea después de una sola
vida real según la inspiración cristiana o después
de varias vidas reales según la inspiración hinduista,
despertando completamente para seguir viviendo en la otra realidad
extraordinaria.
Cuando se concibe una nueva vida se estaría dando la oportunidad
a un
alma libre de vivir para avanzar en su viaje de retorno espiritual.
Otra
Imaginación
La imaginación fluye de muchas maneras: en todas las expresiones
del arte, en la inventiva tecnológica, en los emprendimientos,
en la investigación científica, en los deportes extremos…
Las filosofías espiritualistas y religiones derivadas ofertan a
las personas mundos imaginarios alcanzables para todos después
de la muerte, algunas explícitamente ofertan la “vida
eterna”. Los creyentes cumplen naturalmente el mandato de “creced y
multiplicaos” con la certeza de que la oferta se extiende a la
descendencia. Con imaginación espiritual podemos suponer
que cada ser, más allá de su apariencia y conducta
presentes, es un alma en su viaje de retorno a la espiritualidad.
Para las filosofías materialistas a la persona individual no le
espera nada después de la muerte. Para la ciencia
materialista no hace falta ninguna trascendencia, basta con la
admiración ante la maravilla de la complejidad del universo y de
la evolución de la vida. La ciencia implícitamente
está ofertando otra
imaginación: un mundo de vida eterna
para una futura humanidad, con la desaparición de todas las
enfermedades, eterna juventud, mudanza a otro planeta si la vida se
hace insostenible en éste. Con imaginación
científica se aprecia la vida con la confianza de que la
evolución continuará, que la ciencia irá
descifrando todos los enigmas, que es posible que los humanos
lleguen a “ser como dioses” [14]
-inmortales, sabios, sin enfermedades
y por siempre jóvenes.
Las personas materialistas en el presente pueden asumir dos tipos de
conductas
altruistas: participar a su medida en el gran proyecto del futuro
y “donar” sus genes por intermedio de sus hijos para que la
algorítmica genética no se detenga y eventualmente la
oferta se materialice.
Estos objetivos altruistas no parecen claros para todos. Del
primero, si hay poca o ninguna conexión con el desarrollo
científico. Del segundo, si se piensa que el mundo ya
está muy poblado y si preocupa saber que los hijos
podrán hacerse las mismas preguntas que todos alguna vez nos
hemos hecho: ¿qué es esto de vivir? o ¿qué
será de mí cuando me muera? o ¿cómo
será cuándo me esté muriendo? …
Dice L. Marinoff en su libro Más
Platón y menos Prozac [15]:
“Nos encontramos con que ni la ciencia ni
la religión pueden responder a todas nuestras preguntas. El
psicoterapeuta filósofo Viktor Frankl advirtió que este
hecho conducía a un <<vacío existencial>> y
que la gente corriente necesitaba una nueva vía de salida ”
Para calmar el vacío existencial [16] es
común recurrir a toda clase de distracciones, de adicciones o de
fanatismos, alguna forma de alienación que sirva para contener
los pensamientos y los temores por nuestra muerte segura y la de
los seres amados.
El vacío existencial puede ser resultado de alguna forma de
represión de la espiritualidad en lo profundo del inconsciente
espiritual. De ese mismo inconsciente de donde brota a veces, en
momentos de máxima desolación o angustia, una
sensación de plenitud con un mensaje que sosiega, que susurra:
no
pasa nada, todo está bien en el universo o como lo
expresó tan divinamente Santa Teresa de Jesús: nada te
turbe, nada te espante; todo se pasa…
Notas
y referencias
- Inconsciente
espiritual
Viktor Frankl, padre de la tercera escuela de
psicoterapia de Viena postuló que, además del
inconsciente impulsivo de
Freud, existe en cada persona un inconsciente espiritual de donde
proviene la búsqueda del sentido de la vida, aún en las
peores circunstancias. En su libro “La presencia ignorada de Dios”
[Editorial Helder S.L.,
Barcelona] dice:
“Esta especie de <<fe>>
inconsciente en el
hombre, que
aquí se nos revela –y que viene englobada e incluida en el
concepto de su <<inconsciente transcendental>>-
significaría que hay siempre en nosotros una tendencia
inconsciente hacia Dios, es decir, una relación inconsciente
pero intencional a Dios. Y precisamente por ello hablamos de la
presencia ignorada de Dios.”
- Feuerbach, Ludwig
"El hombre no cree en la inmortalidad porque cree en Dios, sino que
cree en Dios porque cree en la inmortalidad". Ludwig Feuerbach, citado
por Savater, Fernando: La vida eterna. Editorial Ariel S.A. Barcelona
2007, pag. 69.
- Matheson,
Richard
http://en.wikipedia.org/wiki/Richard_Matheson
También
Redfield,
James Imagina que se sueña en el "afterlife":
http://www.celestinevision.com/
- “Sueño
del
alma”
(Google Búsqueda de Libros: "sueño del
alma")
http://buenasiembra.com.ar/salud/meditacion/la-vida-despues-de-la-muerte-744.html
- Savater,
Fernando
"Creo firmemente que si no soñásemos al dormir
jamás hubiéramos imaginado la posibilidad de una vida
perdurable posterior al profundísimo sueño de la muerte".
Savater, Fernando: La vida eterna. Editorial Ariel S.A., Barcelona,
2007, pag 56
- “El Mundo de la
Luz” Marta Sananes.
Artículo inédito, 1993
- Superluminosidad
Olexa-Myron Bilaniuk and E. C. George Sudarshan en
artículo publicado en la revista Physics Today, May 1969 [“Particles beyond the light barrier”,
Phys. Today 22, 43 (May 1969),
DOI:10.1063/1.3035574 http://scitation.aip.org/],
introdujeron el
término “tachyon” [taquión] para referirse a la posible
existencia de partículas superluminales cuya velocidad estuviera
limitada inferiormente por la velocidad de la luz. Dicen en el
Abstract:
FOR MANY DECADES now the view has
prevailed that no particle
could
possibly travel with a velocity greater than the velocity of light in
vacuum, c = 3×108 m/sec. It is generally held that this
limitation is a direct consequence of the special theory of relativity.
Albert Einstein himself has said so in his original paper on
relativity. ©1969 American Institute of Physics
En ese
artículo los autores clasifican a las
partículas elementales en tres clases. A la Clase I pertenecen
las partículas ordinarias subluminales o tardiones;
partículas luminales o luxones pertenecen a la Clase II y las
partículas superluminales o taquiones cuya existencia postulan
pertenecen a la Clase III. Los taquiones tendrían la propiedad
de acelerarse cuando pierden energía y por el contrario,
ganarían energía al aproximarse a su velocidad
límite inferior, la velocidad de la luz.
- “The World of
Light”
Marta Sananes. “The World of Light”, poster en
conferencia Tucson II:
Towards a Science of Consciousness, Tucson, Arizona, 1996. “More on the
World of Light”, poster en conferencia Towards a Science of
Consciousness, Elsinor, Dinamarca, 1997.
- Conocer a Dios
En su libro “Conocer a Dios” [Deepak Chopra: “Conocer a Dios”.
Plaza-Janés, 2000. Pag. 24. [How to know God]], Chopra
presenta su visión cosmológica integrando la antigua
tradición hinduista con conceptos de la Física
cuántica.
“La teoría sobre la creación
que mejor
funciona es
la siguiente: antes del Big Ban, el espacio era infinito, se
expandía como un acordeón en infinitos pliegues o
dimensiones, mientras que el tiempo existía de forma
embrionaria, en forma de eterna presencia sin acontecimientos y que,
por lo tanto, no necesitaba de pasado, presente o futuro. Este estado
era absolutamente vacío en un sentido y absolutamente lleno en
otro, no conteniendo nada que nosotros pudiéramos percibir y,
sin embargo, ahí residía el potencial de todas las
cosas. Tal y como declaran los videntes védicos, no podía
encontrarse ni la existencia ni la no existencia, ya que estos
términos sólo sirven a cosas que han tenido un principio,
un medio y un fin. Los físicos se refieren a menudo a este
estado como una
singularidad: espacio, tiempo y todo el universo material estuvieron
una vez contenidos en un punto; una singularidad es concebida como el
puntito muy pequeño que podamos imaginar y, por lo tanto, ya no
es un punto.”
- Cristianismo
Dios envió a su hijo Jesús a la vida para dar testimonio
de su reino y para prometer la resurrección a la vida
eterna: “Y todo aquel que vive y cree en mí, no morirá
eternamente” [Juan 11:26]
En la imaginación cristiana el
espíritu sólo tiene
una única oportunidad de aprovechar su vida en el mundo real
para merecer el la vida eterna con Dios. Una variante de
imaginación de inspiración cristiana cree
que el espíritu pueda permanecer indefinidamente en estado de
sueño del alma -entre ensueños y pesadillas.
Sufrir pesadillas indefinidamente sería lo más parecido a
un infierno. Ensoñar indefinidamente sería como quedarse
en un limbo.
Los adventistas creen en otra variante: suponen que
la actividad de
soñar puede ir decreciendo hasta cesar completamente.
Sería como la segunda muerte, la muerte también del
espíritu. Está en contradicción con el concepto de
espíritu como ente imperecedero. Sobre la creencia de los
Adventistas en el "sueño del alma": "Su doctrina del
"sueño del alma" es novedosa. Niegan la doctrina de la
inmortalidad del alma y agregan que el hombre, al morir, su alma o
espíritu queda en un estado de completa inconsciencia hasta el
día de la resurrección."
http://www.salvacioneterna.com/aniquilacionismo.pdf
- Hinduismo
Según la tradición hinduista de creencia en la
reencarnación, el espíritu puede vivir múltiples
vidas, mientras quede karma por saldar, hasta liberarse, alcanzando un
estado de consciencia como el estado Moksha
[http://en.wikipedia.org/wiki/Moksha]
del hinduismo o el Nirvana del
budismo.
http://enciclopedia.us.es/index.php/Nirvana_(religi%C3%B3n);
http://www.ministeriosprobe.org/docs/budismo.html;
http://www.meta-religion.com/Religiones_del_mundo/Budismo/budismo.htm;
http://www.libros.com.sv/edicion52/budismo.html
Si el espíritu
vive varias veces, según las ideas de
reencarnación y karma, el proceso de cancelación del
karma hasta alcanzar el estado de la realidad extraordinaria se
llevaría a cabo en las múltiples vidas en el mundo
real. Tras cada vida en el mundo real y mientras el
karma no se hubiere balanceado, el espíritu regresaría
una vez más al mundo real con una nueva vida y una nueva
oportunidad de balancear.
- Gurdjiev,
G.I.
Gurdjiev entrenaba a sus discípulos para estar alertas,
conscientes, inclusive en el sueño:
http://en.wikipedia.org/wiki/G._I._Gurdjieff
- Evolucionismo
espiritual
http://www.unav.es/cryf/evolucionismoycristianismo.html
Josefina
Chacín Ducharne
Josefina Chacín, la esclava
del Señor. Sus
visiones y su “mensaje de Dios” inspiraron a un grupo de personas a
unirse por un tiempo en una experiencia de vida comunitaria “viviendo
el Evangelio” en la “Granja Los Peregrinos”, San Diego de Los Altos,
Venezuela.
Imaginó y expresó en dibujos que los
humanos provienen de un linaje evolutivo diferenciado desde las formas
más primitivas por estar animados por "almas". [La Biblia y el
Mensaje a los hombres de la "Nueva Tierra", Ediciones A/V
(Asociación sin fines de lucro Acción y Vida), Venezuela,
1984]
Martinus
En
la imaginación de inspiración cristiana de Martinus
17:
"El universo es un ser vivo que todo lo
abarca y en el que todos
vivimos. Cada ser vivo tiene una existencia con una duración
eterna. La experiencia de la vida tiene lugar por medio de una
evolución
infinita en la que los contrastes luz y oscuridad, placer y dolor,
bondad y maldad, etc. son necesarios para una renovación
continua de la conciencia. Toda la humanidad terrena llegará
paulatinamente a vivir,
aquí en la Tierra, una existencia totalmente feliz y rica en
acontecimientos. Esto sucederá progresivamente, a medida que
cada hombre, a causa
del malestar, los sufrimientos y otras experiencias, llegue a vivir
totalmente de acuerdo con las leyes que la vida prescribe para la
existencia humana.. El objeto de la vida es la experiencia de la misma
vida y, con respecto a esto, todos los hombres y el resto de los seres
vivos tienen, en realidad, el mismo valor."
En la cosmología de
Martinus el espíritu evoluciona en
ciclos progresivos en las que en cada ciclo se suceden etapas de
existencia en los distintos reinos que considera, desde el reino
vegetal pasando por el animal, el humano, el de la sabiduría, el
divino hasta el de la buena-venturanza. Su imaginación
está expresada en sus escritos y en sus dibujos de los
símbolos.
http://www.martinus.dk/layout_pages/index.php?lang=sp
- “Seréis
como dioses”
Dice la Biblia que la serpiente dijo a Eva y a
Adán:
“Seréis como dioses”. Génesis, 3, 5.
- Marinoff,
Lou
“Más Platón y menos Prozac”. Ediciones B, S.A, 2009.
[título original: “Plato, not
Prozac!”]
“El hombre en
busca de sentido”
En su obra principal, “Man´s search for
meaning” [“El hombre en
busca de sentido”. Editorial Helder S.L., Barcelona], dice Viktor
Frankl:
"We can
discover this meaning in life in three different ways: (1) by
creating a work or doing a deed; (2) by experiencing a something or
encountering someone; and (3) by the attitude we take toward
unavoidable suffering."
http://en.wikipedia.org/wiki/Man%27s_Search_for_Meaning
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